La marcha de este 2022 es la número 31 en nuestro país desde aquella primera en el año 1992. Hace 30 años que continúa la lucha por la diversidad, la inclusión, el reconocimiento y el respeto de todas las identidades y orientaciones sexuales de las personas argentinas, con el objetivo de vivir de manera amorosa, diversa y libre.
La primera marcha, un 2 de julio de 1992, convocó a 250 personas en el microcentro porteño. Personas con caras tapadas con máscaras y antifaces de cartón, por miedo a ser reconocidos, perder sus trabajos y revelar sus identidades. Sin embargo, con orgullo y convicción marcharon por las calles de la Ciudad de Buenos Aires, bajo la consigna: “libertad, igualdad y diversidad.
Esa fecha, un 2 de julio, al ser el primer sábado tras el 28 de junio, en conmemoración de los disturbios de Stonewall en Nueva York (1969), antecedente clave y ejemplo para el resto del continente. Luego en Estados Unidos, Castro -barrio de la ciudad californiana de San Francisco- con la figura de Harvey Milk, se transformaría en el epicentro de la comunidad LGBTIQ+ de ese país, hasta la actualidad.
Este 2022 los reclamos principales son la sanción de la Ley Integral Trans y de la Ley Antidiscriminatoria junto con la consigna “Sí al Lenguaje Inclusivo”, seguramente en referencia a la prohibición, en el ámbito educativo, por el gobierno porteño de Horacio Rodríguez Larreta y la ministra Soledad Acuña.
En Tierra del Fuego se esperan marchas en las tres ciudades. Bajo el lema “Justicia por Nicolás Cristal”, en Ushuaia será el sábado 19; la concentración, a las 16 horas, en Fadul y San Martín. En Río Grande, el sábado 26; la concentración en esta ciudad será a las 15 horas, en el Paseo de la diversidad.