Por GONZOTDF
Hace varias semanas que estaba esperando la llegada de una película al cine. Como fanático de la serie Vikingos, me entusiasmó muchísimo que un director de tanto prestigio como Eggers (La Bruja, El faro) se ocupe de retratar este mundo tan fascinante.
Así que el jueves, día de estrenos de películas en todo el país, me puse mi campera más abrigada, los auriculares y me fui rumbo al cine a ver EL HOMBRE DEL NORTE, que está anunciada en la cartelera de esta semana.
Por una cuestión de cercanía(y de andar a pata) voy al cine más próximo: el que podríamos decir, es el más representativo de la cultura fueguina: el cine Packewaia.
Ya desde el nombre marca una posición netamente localista. La ubicación del mismo, pese a ser céntrico, es muy rara, pues se emplaza dentro de la Base Naval Ushuaia. O sea, es probable que estés mirando cualquier película bélica en la cual es imposible entrar a una base militar por su sistema inviolable de seguridad, ¡y vos estés entrando lo más pancho a mirar la última de Jim Carrey a nuestro Pentágono vernáculo!
El cine Packewaia es un lugar arquitectónicamente raro, ya que tiene forma de medio caño. Estas construcciones también son conocidas como quonset o medio tubo y datan de los años 60-70. Solo quedan algunos recuerdos del cine: el cartel realizado en madera pintado de marrón oscuro y letras blancas (ya muy deteriorado). Puede verse que adentro todavía está la boletería, con un cartón tapando el orificio por donde se retiraban las entradas y en sus paredes de ingreso a la sala, un cartel grande de promoción de la película El Origen (Kings Man).
La pandemia nos dejó sin este tradicional sitio de esparcimiento y como una ironía viral, ahora funciona ahí mismo un vacunatorio del gobierno fueguino.
Pero el actual sitio de referencia para la proyección de películas, es el cine que corresponde a la cadena Sunstar Cinemas, que consta de cuatro salas y se encuentra alojado en el shopping más grande de la ciudad.
Al llegar al segundo nivel del Paseo del Fuego, llama la atención ver que está semidesierto. Supongo que es pleno fin de mes y eso en un país con una inflación galopante es todo un dato confirmatorio. Los tres empleados de atrás del mostrador están haciéndose chistes entre ellos y riendo estruendosamente. No hay nadie esperando entrar ni comprando pochoclos. Me acerco a ellos y pregunto si hace falta adquirir las entradas con anticipación o si está tranquilo el asunto.
-Venite diez minutos antes, no hay casi nadie hoy- me dijo el más joven de los tres muchachos.
Miro los horarios y veo la frase que me liquida: Horario: 22 horas CASTELLANO. Vuelvo al mostrador y pregunto.
-¿Disculpame, la película El Hombre del Norte vino solo en castellano? ¿No está la versión con subtítulos?
-No, ahora todas las películas vienen dobladas, salvo algunas excepciones- me contesta el mismo chico que ahora estaba acomodando las porciones de palomitas de maíz en sus recipientes.
Recuerdo escuchar comentarios de que los norteamericanos rechazaban ver cine en español para no tener que leer subtítulos. Me parecía de una comodidad insana. Nunca pensé que los argentinos adoptáramos la misma costumbre.
Muy a mi pesar, no la voy a ver en la sala de cine. Considero fundamental poder escuchar las voces de los actores originales.
No quiero dejar de mencionar al oasis del cinéfilo ushuaiense, el ciclo CINE NERD llevado adelante por la Municipalidad de Ushuaia en la sala de la Casa de la Cultura. ¿Cuándo vuelve? Un valuarte cultural para todo amante del séptimo arte, donde podés ver una película con los Ramones o THX 1138 de George Lucas, gratis. ¡Dale Municipalidad, habilitame el CINE NERD que viene con subtítulos!